Paro general con impacto dispar en Mar del Plata: fuerte adhesión en el sector público y normalidad en el comercio

El tercer paro nacional convocado por la CGT contra el gobierno de Javier Milei tuvo una adhesión parcial en Mar del Plata, donde se sintió con mayor fuerza en el sector estatal. La medida afectó principalmente a la educación, la salud pública, los bancos y los servicios municipales, mientras que el transporte urbano, el comercio y la gastronomía funcionaron con normalidad, manteniendo el movimiento habitual en gran parte de la ciudad.

Uno de los factores clave para la actividad en las calles fue la no adhesión de la UTA al paro, lo que permitió que los colectivos circularan con regularidad. En consecuencia, muchos comercios abrieron sus puertas y atendieron al público sin mayores complicaciones. Lo mismo ocurrió con bares y restaurantes, ya que el gremio de Gastronómicos también decidió no sumarse a la medida. Sin embargo, sectores como el judicial, ANSES, el Correo Argentino y organismos provinciales vieron una reducción importante en su funcionamiento, con una fuerte presencia sindical.

En el plano educativo, el impacto fue mixto: algunas escuelas cerraron completamente, mientras que otras dejaron la decisión en manos de las familias. La Universidad Nacional de Mar del Plata tuvo una adhesión elevada, al igual que los centros de salud municipales, que trabajaron con guardias mínimas. Además, la recolección de residuos estuvo suspendida y los vuelos programados desde y hacia el aeropuerto local fueron cancelados, reflejando el alcance nacional de la medida en algunos sectores específicos.