En una jugada que confirma el giro definitivo de la oposición hacia una alianza sin medias tintas, Cristian Ritondo y José Luis Espert oficializaron la coalición entre el PRO y La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires. El objetivo es claro: barrer al kirchnerismo del mapa y construir una alternativa de poder rumbo al 2027. “La gente no quiere más internas, quiere una oposición fuerte y unida para ganarle al populismo”, aseguró Ritondo tras reunirse en Casa Rosada con Karina Milei y Diego Santilli.
El acuerdo, que incluirá listas compartidas tanto para el Congreso como para la Legislatura bonaerense, ya tiene estructura y narrativa: músculo territorial y fiscalización del PRO, más la potencia electoral de la marca libertaria. Mientras tanto, Espert —que suena como posible cabeza de lista— no se anduvo con vueltas y disparó definiciones de alto voltaje ideológico: “¿Estamos de acuerdo que al delincuente le espera cárcel o bala? ¿Que el Ministerio de Educación debe ser detonado? Entonces no hay mucho que discutir”.
El frente se prepara para mostrar fuerza política en un acto en La Plata antes del cierre de alianzas. Ritondo, Espert y los libertarios bonaerenses ya se alinean en lo que llaman un “bloque anti miseria”, convencidos de que la próxima batalla se juega en las urnas locales, con la boleta violeta en mano y el objetivo de instalar un nuevo mapa político en la provincia más caliente del país.