El Gobierno bonaerense autorizó una suba escalonada de casi un 11% en las cuotas de los colegios privados que reciben subvención estatal. Las instituciones podrán aplicar un ajuste del 6,5% en julio y otro del 4,2% en agosto, en línea con el incremento salarial acordado con los docentes del sistema educativo. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, las subas permitidas serán de 2% en junio y 2,4% en julio.
Desde AIEPBA, la asociación que representa a más de 5.500 colegios privados en todo el país, aseguran que estos aumentos son imprescindibles para cubrir los salarios docentes. Sin embargo, advierten que el nuevo esquema no contempla los crecientes costos operativos, como mantenimiento e insumos. “El esfuerzo para sostener la calidad educativa es enorme y compartido con las familias”, afirmó su secretario ejecutivo, Martín Zurita.
Este nuevo ajuste se suma a los incrementos que ya se aplicaron durante los primeros meses del año, con subas del 3,8% en diciembre pasado y del 6% en febrero. El escenario se torna cada vez más complejo para los padres, que enfrentan aumentos constantes en un servicio considerado esencial y que, lejos de desacelerarse, parece seguir atado a la inflación.