En pleno corazón de Madrid y lejos del protocolo diplomático habitual, Javier Milei volvió a irrumpir con fuerza en la escena internacional. Esta vez, el presidente argentino se reunió con Edmundo González Urrutia, el flamante mandatario electo de Venezuela, en un encuentro que selló el respaldo argentino al nuevo liderazgo opositor al chavismo. La cumbre, realizada en un lujoso hotel de la capital española, sirvió para afianzar una sociedad política que promete convertirse en eje del bloque liberal sudamericano.
González Urrutia agradeció personalmente el asilo que Argentina otorgó a miembros de su equipo perseguidos por el régimen de Maduro, mientras ambos mandatarios conversaron sobre el futuro político de sus países y la reconstrucción institucional de Venezuela. Milei, por su parte, no escatimó en gestos: incluyó a su hermana Karina, al embajador Wenceslao Bunge y al canciller Werthein en la comitiva, reforzando el mensaje de apoyo al presidente electo, quien ya había sido recibido con honores en la Casa Rosada meses atrás.
La reunión se dio en el marco de una gira agitada que llevó a Milei desde el Vaticano hasta el Madrid Economic Forum, evento en el que cerrará con un discurso a tono con su cruzada contra el estatismo. En paralelo, el vínculo con España sigue en terapia intensiva: sin reuniones con Pedro Sánchez y con VOX como único aliado, Milei volvió a pisar fuerte en suelo europeo… aunque no precisamente para tender puentes con los gobiernos tradicionales.