Concluido el feriado de Carnaval, Mar del Plata cierra una temporada turística con un balance positivo, aunque con cifras inferiores al verano anterior. A pesar del mal arranque en enero por el clima desfavorable y la creciente competencia de destinos internacionales, los sectores vinculados al turismo destacan el buen nivel de ocupación en febrero. Ahora, la expectativa se traslada al próximo fin de semana largo de Semana Santa, donde se prevé una afluencia masiva de visitantes. Las reservas en hoteles y alquileres temporarios muestran una tendencia en alza, y los operadores turísticos confían en que la ciudad reciba un flujo similar o incluso superior al de enero.
Mientras tanto, el escenario político se recalienta con las últimas encuestas que marcan una leve caída en la imagen del presidente Javier Milei y un aumento en la preocupación por la inseguridad. Según un estudio de Management & Fit, el 51% de los argentinos mantiene su apoyo al gobierno, aunque con un descenso de 1.5 puntos respecto a enero. La inflación sigue siendo la principal preocupación, pero la inseguridad ha crecido 5.1 puntos en el último mes, alcanzando un nivel de inquietud similar al de la crisis económica. En la provincia de Buenos Aires, la figura de Axel Kicillof mantiene una alta aprobación en el conurbano, pero su imagen se debilita en el interior bonaerense, donde el liberalismo gana terreno.
En este contexto, Mar del Plata se prepara para ser sede de una reunión clave entre referentes del PRO y la UCR el próximo 10 de marzo, en la que se definirá la estrategia de cara a las elecciones legislativas. Mientras algunos sectores buscan fortalecer la alianza contra Kicillof, otros analizan tomar distancia del gobierno de Milei sin romper completamente los lazos. Con especulaciones y negociaciones en marcha, la política marplatense entra en un juego de alianzas que podría definir el rumbo de la oposición en la provincia.