A pocos días del comienzo del ciclo lectivo, más de 700 estudiantes de escuelas rurales en Tandil enfrentan la incertidumbre de no poder asistir a clases debido a la falta de renovación en los convenios con los transportistas. La situación ha generado una fuerte crítica hacia el Consejo Escolar, señalado por no haber gestionado a tiempo la continuidad del servicio esencial para el traslado de los alumnos.
Desde distintos sectores educativos y sociales se ha expresado preocupación por la falta de respuesta ante un problema que afecta directamente el derecho a la educación. Se argumenta que, pese a contar con los fondos necesarios desde la Provincia, la falta de gestión ha llevado a una crisis innecesaria, dejando a cientos de niños sin acceso a sus escuelas. La comunidad educativa exige una solución urgente para evitar que los estudiantes pierdan días de clase.
El conflicto ha desatado un fuerte debate, con acusaciones de inacción y cuestionamientos sobre las prioridades del Consejo Escolar. Mientras tanto, familias y docentes esperan una resolución inmediata que garantice el inicio normal del ciclo lectivo, subrayando que la educación no puede quedar relegada por cuestiones burocráticas o políticas.