El precio de la carne sigue en alza y ya acumula tres aumentos en poco más de un mes en Tandil, donde el kilo de ternera alcanza un promedio de 11.000 pesos. Este incremento también impactó en otros productos como el cerdo, que ronda los 6.500 pesos el kilo, y el pollo, que llega a 3.500 pesos, con la pechuga alcanzando los 7.600 pesos. Los comerciantes advierten que, a pesar de algunas promociones, el consumo ha disminuido notablemente tras las fiestas de fin de año.
Desde el sector cárnico aseguran que la situación es insostenible. “Después de las fiestas, la gente compra lo justo. Lo que más se vende es pata y muslo, porque es lo más accesible”, explicó un carnicero local, quien bromeó diciendo que necesita “un té de plumas” para enfrentar la baja en las ventas. Además, muchos consumidores habituales dejaron de aprovechar la promoción de Cuenta DNI del Banco Provincia, que no estuvo disponible en los primeros sábados del mes, lo que agravó la caída en el movimiento de las carnicerías.
Los comerciantes también hicieron un repaso de los últimos aumentos, señalando que el primero fue a fines de noviembre, con un ajuste de entre el 10 y el 12 %, seguido de otro en diciembre y un tercero en enero. Pese a los incrementos, se especula que el precio de la carne podría estabilizarse por la baja en el consumo. “La gente está muy ajustada, enero es un mes eterno. Las tarjetas están al límite y ya no hay margen para seguir subiendo”, concluyen desde el sector.